Una cosa que admiro de mi amiga Jogré es que no recuerdo haberla visto nunca triste ni molesta. Siempre carga una sonrisa hermosamente plantada en sus labios y suele ser tan espontánea que destaca fácilmente entre un millar de personas.
Extraño muchísimo los desayunos americanos, el café y la respectiva conversa de nuestros tiempos de labores en el Bloque DeArmas.
¡Tenemos un desayuno prometido amiguis!
12 marzo 2007
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario