¡Casarse es una loquetera! Esta semana Helge y yo hemos estado haciendo diligencias para buscar los papeles necesarios para casarnos y los trámites de verdad que lo dejan a uno con la lengua afuera.
Mientras Helge desde su computadora hace trámites por mail, yo he tenido que recorrer media Caracas preguntando, buscando números, haciendo colas y demás. Tuve que llenar una planilla en alemán y no entendía ni papa, Helge por supuesto me prestó sus servicios de traducción.
Mañana me tengo que parar bien temprano porque tengo que buscar mi partida de nacimiento. Tengo pendiente notariar la carta de soltería que ya está hecha y después hay que traducir y apostillar para mandar todo para Alemania y de esta manera hacer que Helge reciba todos sus documentos listos para el enlace. Posteriormente la carpetica con nuestros documentos va a Aruba porque tenemos pensado casarnos por allá.
En estos días me crucé con mis amigos Geo y Carlos que van a casarse la semana próxima, andaban en las mismas que nosotros, en una corredera sin fin que lo deja a uno medio muerto. Eso justifica mi ausencia de este universo fantástico en el cual me encanta escribir.
Tengo mucho que contarles, muchas cosas buenas han pasado, muchos planes nuevos han aparecido, la vida se me muestra limpia y con mucha luz al futuro. Comparto mi alegría con ustedes, ¡en unas semanas despejaré la incógnita!
03 mayo 2007
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2 comentarios:
sí, es un trajín... y después que me casé, fue que entendí por que muchas parejas lo deciden un año antes....
Y que decirte de intentar de nuevo! creo que quede traumada y hasta por flojera no lo intento!, de todas maneras, mi mejor consejo es que esta gestión sea para siempre!.
Felicidades.
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